Cuando publiqué la excursión de Vilaplana a La Mussara, dije que en el horizonte podía verse algo muy especial. Era un castillo, el Castell d’Escornalbou.
Primero fue castillo; segundo, monasterio; y tercero, residencia privada de Eduard Toda i Güell, un diplomático, egiptólogo y vecino de Reus que lo compró.
Su historia es curiosa.
Toda decidió hacerse con él después de que quedara prácticamente en ruinas con la Desamortización de Mendizabal en 1835. Entonces, empezó las reformas.
Las obras obedecieron a su propio gusto. De hecho, hizo caso omiso a las recomendaciones propuestas por el propio Josep Puig i Cadafalch.
De entre todas sus decisiones de diseño, la más llamativa fue añadir en las paredes de la fortaleza 7 caras japonesas que todavía hoy pueden observarse.
Actualmente, el Castell d’Escornalbou es el punto de encuentro de excursionistas, ciclistas y turistas llamados por un entorno con unas bonitas vistas.
En lo que nos atañe, representa una excursión agradable con la que conocer el patrimonio de la zona. Eso, sin pegarnos una paliza de leyenda.
Además, si te lo montas bien, llegarás a tiempo de apuntarte a la visita teatralizada. Su guía te sonará de algo… Es un actor que representa al mismísimo Toda.
Ficha técnica del Castell d'Escornalbou

Dificultad física
Como siempre digo en Camino con Santiago, poca distancia y desnivel positivo es igual a subidas que nos dejan sin aliento. Es el caso del Castell d’Escornalbou.
Desde la salida de Duesaigües asciendes poco a poco. Cuando dejes atrás l’Argentera, subirás 260 metros en poco más de 1 kilómetro. Es lo más duro.
La bajada no tiene mucho misterio. Desciende progresivamente hasta volver al punto de inicio. Si te animas o se te hace pasada, puedes correr sin problemas.
Dificultad técnica
Por suerte, el Castell d’Escornalbou carece de dificultad técnica. El tramo más empinado está en buenas condiciones. Eso sí, los palos ayudan mucho.
La bajada combina unos metros de carretera con una pista asfaltada que se convertirá en un sendero de tierra. Es paulatina, así que no hay de qué preocuparse.

Cómo llegar al punto de inicio
Aunque propongo aparcar en el pueblo de Duesaigües, concretamente en el aparcamiento que hay en la entrada, también puedes hacerlo en La Argentera.
De esta manera, te ahorrarás un par de kilómetros a cambio de dejar la excursión en un mero anécdota. Salvo que vayas con prisas, aparca en Duesaigües.
Además, a la vuelta podrás comer algo en Cunirri, un restaurante familiar que encontrarás junto al coche y en el que recuperar fuerzas. ¡Tiene más de 20 años!
Sea como sea, llegarás a Duesaigües bordeando el pantano de Riudecanyes. Antes pasarás por el propio pueblo de Riudecanyes y por Montbrió del Camp.
Cómo llegar al Castell d'Escornalbou
El camino es fácil de seguir. Desde el aparcamiento de Duesaigües, vuelve a la carretera que entra al municipio. Sigue recto y encuentra el panel de dirección.
Este sendero conduce a l’Argentera. Pronto te encontrarás un cruce. A mano izquierda te quedará el sendero por el que volverás. Tú sigue recto.
Dejarás el siguiente pueblo a la izquierda, bajando por un sendero que pasa por unas antiguas granjas. Pocos metros después encontrarás un panel de dirección.
Ahora viene lo bueno. Se trata del subidón hasta el Castell d’Escornalbou. Ya arriba del todo, sigue por la carretera hasta tomar el camino asfaltado a la izquierda.
Sigue todo recto sin toma ningún desvío. Acabarás llegando a la bifurcación del principio. Te acordarás porque justo en el cruce está el antiguo lavadero.

Puntos de interés
- El pantano de Riudecanyes. No se encuentra en la ruta, tendrás que acercarte en coche antes o después. Está junto al pueblo de Riudecanyes.
- En Duesaigües, encontrarás el Viaducte dels Masos: un viaducto de 14 arcadas repartidas en 2 niveles por el que pasa el tren. Fue construido en 1889.
- El pueblo de L’Argentera. Situado en la falda de una sierra, la ruta pasa por él justo antes de acometer la subida. Sus calles son muy pintorescas.
- Por supuesto, el Castillo Monasterio de Sant Miquel de Escornalbou. Procura enlazar tu excursión con una visita teatralizada y le sacarás el máximo provecho.
- La ermita de Santa Bárbara, cuyo camino nace en el recinto del castillo. La vista desde ella es la más espectacular que encontrarás en esta excursión.
Fotos del Castell d'Escornalbou












